Cuando pensamos en logística artística, muchas veces nos centramos solo en el transporte: cómo mover una obra del punto A al punto B. Pero hay una fase clave que a menudo pasa desapercibida y que, si no se gestiona correctamente, puede comprometer la integridad de una pieza: el almacenaje. En este blog queremos explorar cómo combinamos en EnviArte el almacenaje y la logística para ofrecer un servicio completo, seguro y profesional a artistas, galerías y coleccionistas.
El arte necesita condiciones especiales
Desde nuestra experiencia gestionando envíos para ferias, exposiciones y colecciones privadas, sabemos que no se puede almacenar arte como se almacena una caja de libros. Las obras, especialmente las más delicadas o valiosas, requieren condiciones ambientales específicas:
- Temperatura y humedad controladas.
- Protección contra la luz directa.
- Espacios libres de polvo y vibraciones.
- Seguridad física y digital 24/7.
No es raro que una obra tenga que permanecer días, semanas o incluso meses en un punto intermedio antes de llegar a su destino final. Por eso, contar con un buen sistema de almacenaje no es un lujo: es una necesidad profesional.
Almacenaje temporal vs. almacenaje prolongado
En nuestra práctica diaria distinguimos dos tipos principales de almacenaje:
a) Almacenaje temporal
Ocurre cuando una obra está en tránsito entre dos destinos. Por ejemplo, cuando una escultura debe ser entregada en una galería una semana después de haber llegado al país, o cuando se agrupan varias obras antes de una exposición internacional. En estos casos, lo más importante es:
- Evitar movimientos innecesarios.
- Garantizar accesibilidad rápida para su futura recogida.
- Mantener la documentación lista y disponible.
b) Almacenaje prolongado
En otras ocasiones, artistas o coleccionistas nos solicitan guardar obras durante periodos largos, ya sea por falta de espacio, razones fiscales o planificación de exposiciones. Aquí el protocolo es más exigente:
- Control riguroso de temperatura y humedad.
- Estanterías o soportes diseñados para evitar tensiones.
- Revisión periódica del estado de las obras.
- Registro fotográfico y digital actualizado.
En ambos casos, nuestro equipo realiza un protocolo de entrada que documenta el estado de la obra, los materiales de embalaje y las condiciones de conservación necesarias. Así aseguramos que cada pieza esté siempre custodiada como merece.
Riesgos del almacenaje no especializado
Hemos visto de todo: obras almacenadas en trasteros, sótanos húmedos, estanterías metálicas sin protección… En estas condiciones, el riesgo es altísimo:
- Deformaciones en bastidores por humedad.
- Desprendimientos de pigmento por temperatura extrema.
- Roturas en esculturas por movimientos mal calculados.
- Daños por insectos o roedores, incluso en obras embaladas.
Por eso, siempre insistimos en lo mismo: el arte no se guarda, se conserva. Y esa conservación empieza desde la logística.
Cómo integramos el almacenaje con la logística
Una de nuestras mayores fortalezas en EnviArte es ofrecer una cadena logística completa y sin interrupciones. No subcontratamos partes del proceso a empresas que no comprendan la naturaleza del arte. Cada fase está diseñada para proteger la obra:
- Coordinamos el transporte seguro desde el estudio o galería hasta nuestro centro logístico. • Allí realizamos la recepción y registro digital con informe fotográfico. • Ubicamos la obra según su tipología (bidimensional, tridimensional, frágil, etc.). • Si es necesario, rediseñamos el embalaje técnico para almacenaje prolongado.
- Finalmente, programamos la salida según destino final, con opción de reempaque y transporte internacional.
Todo ello, acompañado por un seguimiento personalizado y contacto directo con nuestro equipo. Queremos que nuestros clientes se sientan informados y tranquilos en todo momento.
Casos reales que nos han marcado
Uno de los casos más complejos que hemos gestionado fue el de una galería que cerraba temporalmente por reformas. Nos confiaron 87 obras de pequeño y mediano formato, entre grabados, acrílicos y esculturas en madera. Diseñamos un sistema de almacenaje por módulos, con control ambiental por zonas y supervisión continua.
Durante los cuatro meses que duró el almacenamiento, ninguna obra sufrió daño ni alteración. De hecho, algunas se vendieron durante ese periodo y pudimos enviarlas directamente desde nuestras instalaciones, evitando doble manipulación. Fue un ejemplo perfecto de cómo un almacenaje inteligente se convierte en una herramienta de venta.
¿Cuándo es necesario contar con almacenaje profesional?
Algunos artistas o galeristas nos preguntan cuándo conviene contar con almacenaje especializado. Nuestra respuesta es clara:
- Cuando las obras no tienen un espacio seguro disponible.
- Cuando se exportan y necesitan un punto intermedio de consolidación. • Cuando se planifica una exposición futura y se requiere una gestión logística previa. • Cuando se desea optimizar el espacio sin comprometer la integridad de las piezas.
En todos esos casos, contar con un partner como EnviArte aporta eficiencia, seguridad y tranquilidad.
Conclusión
El almacenaje y la logística no son etapas separadas: forman parte de una misma estrategia de conservación y movilidad del arte. En EnviArte, entendemos que cada obra merece no solo llegar a su destino, sino esperar en el camino con las mejores condiciones posibles.
Por eso, ofrecemos un servicio completo que combina almacenaje técnico, transporte especializado, control ambiental y atención personalizada. Nuestro objetivo es que artistas, galerías y coleccionistas puedan centrarse en lo que realmente importa: el arte.
Descubre más sobre nuestros servicios en www.enviarte.art y déjanos ayudarte a proteger tus obras en cada etapa de su viaje.